El hombre es un ser social
Hemos escuchado algunas veces que los seres humanos necesitamos estar rodeados de gente para sobrevivir…
Mis amigos más cercanos coinciden en afirmar que el hombre puede alcanzar la longevidad solo si siente el amor de su familia, si no se siente solo, independientemente de su manera de comer, de su empleo y hasta de su genética…
Los lazos familiares son el alimento de la vida… Sólo teniendo apoyo emocional en el entorno laboral, familiar y social es suficiente para tener una vida larga y plena.
No valemos, sólo SOMOS ¿Es importante sentirse reconocido?
La sensación de “valer” y de reconocimiento es importante en el mundo de ilusión en que vivimos. Pero el valor de uno mismo no se mide en lo que haces o lo que tienes sino en lo que eres. Hay gente que tiene reconocimiento, dinero, familia, apoyo y sin embargo no soporta la vida. Hay personas que solo tienen ganas de vivir y se sienten plenas porque tienen una sólida formación espiritual. Este tipo de personas suelen vivir más y felizmente.
¿Longevidad o eternidad?
Hay múltiples leyendas en las diferentes culturas y contextos religiosos tanto en el pasado (como la de Matusalén en la Biblia que vivió 969 años)como en el futuro.
Personas que sobrepasan los cien años no son sólo del interés científico, sino también del público en general interesado en alargar de manera saludable sus años de vida.
En las religiones judeo-cristianas, Adán y Eva fueron creados con la orden de no comer del «árbol de la ciencia del bien y del mal, porque el día que comieres de él, morirás sin remedio«.
Para el budismo y el hinduismo, así como en las antiguas religiones egipcias, el alma del ser humano y de todos los seres vivientes tiene más de una vida, (re-encarnación).
Numerosos sistemas filosóficos a través de la historia, por ejemplo el gnosticismo, han buscado también la inmortalidad y el mito de la “Fuente de la juventud”. Muchas de ellas plantean que ésta se logra por medio de la búsqueda de la sabiduría y el dominio del cuerpo mortal, pero otras sugieren la existencia de substancias, fuentes o lugares que detienen el deterioro biológico del cuerpo humano.
El estilo de vida y la actitud
Aunque los genes pueden ayudar, la realidad es que solo son responsables de un tercio de los secretos para llegar a los 100 años. El resto proviene de la forma en que nos cuidamos. Mantener actividad física y mental, así como una alimentación balanceada y, lo mas importante es la actitud con la que nos enfrentamos a los problemas cotidianos.
Para alcanzar la longevidad felizmente y en forma
-entablar conversaciones con los ancianos: hablar de su pasado, conversar sobre el presente y lo que pasa en el país para que también mantenga contacto con la realidad y el diario vivir.
-mantener las relaciones afectivas, no aislarse y tener grupos de apoyo.
-actividades espirituales como la meditación y la oración bajan los niveles de ansiedad y depresión.
Sólo hay 70 casos demostrados en la historia de personas que hayan alcanzado los 114 años. De ellos, sólo 25 alcanzaron los 115 años, y sólo 10 llegaron a los 116. La única persona que, demostradamente, ha pasado la barrera de los 120 es Jeanne Calment, http://es.wikipedia.org/wiki/Jeanne_Calment.
Hoy la esperanza media de vida sigue aumentando en los países occidentales a un ritmo de unos dos años por década.
Magdalena Virrey de Blanco
Magdalena tejiendo una bufanda en su telar
En un reciente viaje conocí a Magdalena, una señora con un carácter firme y amoroso. Me llamó la atención lo activa que es, su trato tan amable, la deliciosa comida que prepara y su manera de llevar la vida.
Ella nació en Durango, México, el 11 de abril de 1924 en una hacienda de cultivo de maíz, frutas y donde se practicaba la ganadería. En el seno de una familia que ella misma describe como «honrada, trabajadora y amorosa».
Se siente muy orgullosa de los años que tiene y de todo lo que ha vivido.
Tiene 87 años y vive actualmente con la familia de su hija Rosalía Blanco de Cuevas. Tuvo 11 hijos.
En sus “ratos libres” como ella misma dice, teje. Tanto crochet como en telares. “Hago bufandas, gorros, pantuflas, chales… Siempre tengo encargos de gente conocida, me siento útil y agradecida porque siempre me entra un dinerito extra”.
¿El secreto de mantenerse activa y feliz?
-Comer sano, alimentación natural, integral, leer, cocinar en horno de leña todo, desde pan hasta tamales.
«Bajo las circunstancias, me miro y me doy cuenta que ya no soy la misma. Pero yo todavía tengo ánimo de hacer muchas cosas».
Dice sentirse bien “con mi edad y por no padecer ningún achaque”.
Se mantiene activa y siempre camina por el vecindario de la casa donde vive con su hija.
«Yo nunca mandaba a nadie a hacer las cosas, siempre las hacía yo misma», afirma en tono enérgico.
«Me siento conforme con la vida que tengo y el amor que recibo. Siempre tengo deseos de vivir y de hacer cosas».
Atribuye su longevidad al trabajo «con la mente», al esfuerzo físico y al ahínco con el que siempre trabajó, además de una vida “sin excesos”… “el dar y recibir amor, el trabajo y el mantener la mente ocupada es lo que hace que las personas no se pongan viejas».
Actualmente Magdalena vive en Norwalk, Los Angeles, California, USA… Tiene más de 20 años viviendo en ese país…
Magdalena me dio una bella bufanda de regalo